Puedo entender que estés bajo cero.
Puedo entender que te quemen las cenizas del cuarto invierno,
pero puedo apagar el quinto incendio.
Y hacer hogueras con las nubes
para que sonrías los días grises.
Del uno al diez
el problema es que te cuento
las pecas
a besos
y me pierdo
antes de llegar a veintitrés.
Hazte así que tienes ocho despedidas en el hombro
y yo tengo dieciocho formas de reconquista.
-querer , correr, salvar, hacer...
deshacerlo y respirar-
Verte irte
triunfante
o feliz.
Voy a diecinueve suspiros por latido
de todas las veces que
no te he pedido que te quedes
y me has pedido que me vaya;
De piel a piel retrocedo otra vez porque
he llegado a diez y cuando menos te lo esperes
te escribo, y respiras,
Cantarnos las veinte
a gritos porque las otras veinte
vamos a bailarnosla con la soga en los tobillos.
que dos y uno son veintiuno y el tres viene con lluvia
y cuando llueve,
estas mejor desnudo;
Y me he escondido veintidos
maneras de escribirte sin mancharte la piel,
da igual el trazo o el trozo si es donde duele
o donde cura, si te dibujo o me dibujas.
Da igual que llegue veintitrés, porque te quedaste en el diez
y he empezado a contarte otra vez.